El senador nacional y candidato a gobernador de Juntos por el Cambio, Ignacio «Nacho» Torres, expresó, cuando lanzó su campaña en el Hotel Rayentray de Puerto Madryn, que promoverá un proyecto de ley para eliminar los fueros a funcionarios públicos. El anuncio coincide con lo señalado hace algunos días, cuando reveló que se consensuó con los postulantes a diputados provinciales que renuncien a ciertos privilegios como viáticos extraordinarios, uso de vehículos 4×4, alquileres en Rawson, entre otros.
El legislador, que buscará acceder a la Gobernación de Chubut en las elecciones del 30 de julio, señaló en aquel encuentro que instruirá a los diputados, en caso de alcanzar el poder, para que redacten un proyecto de ley que elimine los fueros a funcionarios públicos; posterior reforma de la Constitución Provincial y referéndum ciudadano.
El referente de Movimiento Ciudadano y estudiante de Ciencias Políticas, Rodrigo Almonacid, comentó a EL CHUBUT que en el acto de Madryn «se hizo mención a la eliminación de los fueros, en caso de Juntos por el Cambio triunfe en las elecciones». «Lo cierto -aclaró el joven estudiante- es que los fueros están creados en nuestra Constitución a los fines de proteger la función de los funcionarios públicos». Incluso esa inmunidad alcanza a los ministros del Ejecutivo a dirigentes sindicales, por lo que constituye «una configuración muy amplia. Si bien no existe un proyecto concreto, seguramente se avanzará si es que Juntos por el Cambio gane la elección provincial».
Estas reformas, comentó Almonacid, «tienen que ver con mejorar la calidad democrática de las instituciones públicas. Eliminar los fueros significa que todos estemos en igualdad de condiciones ante la ley, y sean juzgados por sus actos. Es un elemento muy importante al momento de hablar de la lucha contra la corrupción, y merece debate».
A fin de ejecutar estas reestructuraciones, «hay que modificar la Constitución Provincial». Y para ello «hay que hacer una enmienda constitucional, que puede hacer la Cámara de Diputados con una mayoría agravada de dos tercios; esa modificación luego tiene que ser sometida a decisión de la ciudadanía, y a un referéndum popular en próximas elecciones».
De todas maneras, «tiene que darse un debate amplio, y explicarle a la gente de lo que estamos hablando».
